NORMA BIRRI DE VERMEULEN NORMA ( 19 de mayo de 1930-5 de mayo de 2018)
Fue una activista argentina por los derechos humanos, madre de la plaza 25 de Mayo de Rosario. En 1950 se casó con Agustín (f. 2011) y tuvieron dos hijos: Jorge nacido en 1952 y Osvaldo (Pupa) en 1954. Osvaldo Militante de la Juventud Trabajadora Peronista y Montoneros, estaba casado y tenía una hija pequeña. Secuestrado en Rosario el 1° de abril de 1977 por la última dictadura militar a sus 23 años. Fue llevado
herido al centro clandestino de detención El Pozo, antes de su asesinato ocurrido días más tarde, continuando desaparecido. Norma integró la Asociación de Familiares de Desaparecidos y Detenidos por Razones Políticas entre 1977 y 1985. Desde 1988 formaba parte de la organización Madres de la Plaza 25 de Mayo (Rosario). Norma estaba siempre. Parecía eterna. Iba a las escuelas, participaba en todas las marchas, aunque le
a la Plaza a llorar, a lamentarse de cosas… Lo que menos hicimos nosotras es lamentarnos, porque vos te quedás… había dos opciones: o quedarte enferma a llorar, continuamente, pensando y pensando, enfermarte; ¡o salir a luchar!. Norma murió a sus 88 años. Su lucha estaba forjada en su presencia constante y la claridad sobre lo importante en cada momento, esa que le dio haber persistido en la búsqueda de su hijo. Siempre iba al comienzo y el final de los juicios por delitos de lesa humanidad. Cuarenta y un años
herido al centro clandestino de detención El Pozo, antes de su asesinato ocurrido días más tarde, continuando desaparecido. Norma integró la Asociación de Familiares de Desaparecidos y Detenidos por Razones Políticas entre 1977 y 1985. Desde 1988 formaba parte de la organización Madres de la Plaza 25 de Mayo (Rosario). Norma estaba siempre. Parecía eterna. Iba a las escuelas, participaba en todas las marchas, aunque le
costara cada vez más llegar. Siempre mirando con sus ojos transparentes hacia el futuro. “Nosotras ya no vamos a estar, pero ustedes van a seguir con la lucha”, es una frase que repetía en los últimos años. Su presencia es irremplazable, aunque ella se ocupó una y otra vez de sembrar el futuro. Cada vez que era necesario movilizarse, allí estaba siempre ella, con sus palabras de aliento.“Hay gente que se piensa que una va
después de aquella tragedia que marcó su vidas, Gloria, la compañera de Osvaldo, y su hija, Paula, lloraban su pérdida. “Fue mi compañera de tantos años”, decía Gloria. Lúcida y cálida Norma no imponía, escuchaba y decía lo que pensaba. Como tantas veces en estos años, el 4 de mayo de 2017, fue la plaza 25 de mayo el lugar elegido en Rosario para repudiar el fallo del 2×1 que abría la puerta a la libertad de muchos represores. Norma estuvo allí, junto a Chiche y Lila Forestello. Sus palabras fueron:
“Hoy estoy un poco bajoneada, pero sé que tenemos que seguir defendiendo a diario lo que conseguimos. Nosotras por razones de edad, hay momentos en que queremos bajar los brazos, decir hasta acá no más. Pero pensamos en las nuevas generaciones, en el presente y en el futuro, y en que no tengan que pasar lo que hemos sufrido nosotras. Que nunca más haya una dictadura. Que nunca más sea realmente nunca más. Norma es una mujer eterna, porque ella siempre seguirá estando. Hasta Siempre. Hasta la Victoria
“Hoy estoy un poco bajoneada, pero sé que tenemos que seguir defendiendo a diario lo que conseguimos. Nosotras por razones de edad, hay momentos en que queremos bajar los brazos, decir hasta acá no más. Pero pensamos en las nuevas generaciones, en el presente y en el futuro, y en que no tengan que pasar lo que hemos sufrido nosotras. Que nunca más haya una dictadura. Que nunca más sea realmente nunca más. Norma es una mujer eterna, porque ella siempre seguirá estando. Hasta Siempre. Hasta la Victoria
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